" LA AUTOMOTRIZ JAPONESA TOYOTA, DESARROLLA UN AUTO, CON UN SISTEMA CAPAZ DE MEDIR LA ALCOHOLEMIA DE UNA PERSONA "

Los fabricantes de automotores Toyota Japan están estudiando y desarrollando un novedoso sistema que detecta en forma automática si el conductor ha consumido alcohol en exceso, y hace que detenga el vehículo en forma automática.

El sistema está compuesto por varios sensores que son capaces de determinar el nivel de alcoholemia y producen en la dirección del auto un giro anormal, junto a una pequeña cámara que verifica que las pupilas del conductor se encuentren apuntando hacia adelante.

Pero el sistema además de ser capaz de medir el grado de alcoholemia de la persona, tiene el plus de poder interferir en el movimiento mismo del vehículo, ya sea en su arranque o mientras se encuentre andando.
El equipo puede medir si el conductor está ebrio, y en ese caso "NO ARRANCA" y si yá está en marcha, tiene el mando para poder ir reduciendo la velocidad del auto hasta "DETENERSE COMPLETAMENTE".

La firma Toyota, segundo productor mundial de automotores, estimó que las primeras unidades provistas con éste sistema estarían a la venta recién en el año 2009.

El alcohol es el principal factor de riesgo para sufrir un accidente de tráfico.
La bebida es una droga psicodepresora que, incluso en pequeñas dosis, influye negativamente en la conducción ya que perturba las aptitudes del conductor. Esta droga, después de ingerirse y al pasar a la sangre se extiende por todo el organismo afectando al cerebro y a la vista. Probablemente, éste sea el factor de riesgo más importante en los accidentes de tráfico.

Según la Dirección General de Tráfico (DGT), los efectos del alcohol dependen de:

1- Las condiciones personales como la edad, el hábito y la costumbre.

2- La constitución física del conductor ya que a mayor peso es necesario ingerir mayor cantidad de alcohol para lograr el mismo nivel de intoxicación.

3- Modalidades de la ingestión como la cantidad de bebida y su concentración; modo de consumo de la bebida (en ayunas o durante las comidas); tiempo o ritmo de ingestión de la bebida, o que el alcohol esté gasificado o caliente, ya que estas condiciones potencian la rapidez de aparición de la alcoholemia.

Asimismo, el alcohol produce en el individuo un estado de falsa euforia o exceso de confianza en sí mismo que puede perturbar las verdaderas capacidades en la conducción; una apreciación errónea de la distancia de la velocidad y del riesgo; una conducción agresiva, y una reducción del campo visual, así, el ángulo de visión de los laterales disminuye.

Más info: http://www.toyota.com.ar/