" CHRYSLER DESEMBARCA EN CHINA "

El grupo norteamericano confirmó que llegó a un acuerdo con el fabricante chino Chery para la producción de pequeños vehículos que serán vendidos en Europa y América.

A través del convenio, la terminal intentará incrementar sus ventas en la Unión Europea y la zona del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), bajo la marca norteamericana.

Jason Vines, portavoz de Chrysler, confirmó a EFE que los dos fabricantes han firmado "una carta de intenciones" que será presentada "pronto" para su aprobación ante el consejo de DaimlerChrysler.

Vines señaló que no podía proporcionar detalles de cuándo o cuántos vehículos serán producidos bajo el acuerdo. Los vehículos serían producidos en China.

Vines añadió que la entrada en producción sería "pronto", sin especificar fechas. El Grupo Chrysler adolece de un vehículo de pequeñas dimensiones y ya en el pasado señaló que no podría producirlo, debido a los reducidos márgenes que este tipo de vehículos ofrece.

En septiembre, durante un discurso pronunciado ante la Asociación de la Prensa del Automóvil de Detroit, el director ejecutivo del Grupo Chrysler, Tom LaSorda, afirmó que el Grupo Chrysler "entraría en el segmento subcompacto (coches pequeños) si pudiese desarrollar" un producto que aporte beneficios, lo que sólo puede hacer mediante un acuerdo con otro fabricante.

"Seguimos debatiendo un acuerdo en el segmento B con socios potenciales y todo lo que puedo decir es que sigan atentos", dijo entonces LaSorda, quien añadió que el anuncio se podría producir "en algún momento durante el cuarto trimestre" del año.

Los planes de Chrysler serían que Chery fabricase un vehículo menor que el modelo Dodge Caliber y en la línea con el prototipo Dodge Hornet que presentó en febrero en el Salón del Automóvil de Ginebra.

Chery es una de las compañías chinas que había anunciado planes para empezar a exportar vehículos al mercado estadounidense lo antes posible, lo que añadiría presión a los tres fabricantes estadounidenses (General Motors, Ford y Chrysler) en crisis por la ascensión de los fabricantes japoneses y surcoreanos en los EE.UU.